Turismo Cultural - Cementerios de Villa Urquiza

CEMENTERIO DE VILLA URQUIZA

Turismo Cultural en Villa Urquiza


Salida fotografica organizada por la comunidad de Facebook "Flicker Parana" bajo la tematica "Los 3 cementerios Antiguos de Villa Urquiza"


 Desde el acceso, denominado 1ra. Colonia Agrícola Militar Las Conchas, uno puede doblar hacia el Norte por la calle Gastón de Cleves y dar de lleno con un resumen casi perfecto de la historia de la ciudad.

Primero, el cementerio católico, luego el protestante y finalmente, ya junto al río, el más antiguo, el de los criollos. Si éste padece el mayor abandono, el protestante no le va a la zaga, con sus criptas que lucen un antiguo esplendor de los inmigrantes alemanes pero arruinadas por el tiempo.

 Hay un cuarto camposanto en el hogar La Providencia, de las hermanas franciscanas de Gante, con más de un siglo aquí.

El cementerio viejo motivó esta visita en una jornadade lloviznas, el sábado último. Más de 300 cruces de hierro, la mayoría caídas, apiladas y tapadas por los cardos y el pastizal, presentan un panorama desolador. Son las tumbas de los fundadores, la mayoría protagonistas de las violentas luchas federales y de la incipiente producción agroganadera que aún hoy distingue a la zona, aunque las ovejas de antaño se cambiaron por las vacas.

El camposanto, de poco más de una hectárea, limita con un camino natural, los montes de ombúes, algarrobos y espinillos, y a sólo 30 metros las barrancas, con una vista majestuosa del río.
"Yo hace rato que no paso por ahí, nadie tiene parientes cercanos, pero siempre estuvo abandonado", dijo el balsero Cardeña. "Es una lástima que no se conserven las cosas; hace algunos años se limpió todo, pero los muchachos amontonaron las cruces caídas, y algunas alguien se las llevó... eso tiene que rescatarse, es una reliquia", agregó Micaela Aceñolaza.
Cala recuerda haber visto familias que llevaban flores "cuando era chica", es decir a principios de siglo, y reconoce que el abandono del primer camposanto viene de lejos.
El portal construido hace 150 años con un muro de enormes ladrillos, que delatan su antigüedad, rematado en cuatro cruces, y un portón de dos hojas de hierro con ornamentos que ha sido trepado por el mburucuyá y otras enredaderas ofrecen un aspecto
estremecedor. Son las ruinas.
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En todos lados hay cruces de hierro o de planchuelas remachadas, labradas las otras, y casi todas con un corazón en el que los deudos dejaron grabado su recuerdo. El óxido borró muchos nombres y otros perduran en las chapas de cobre con fechas del siglo pasado: Aguidito Coronel, Telesfor Pérez, Serapia Martínez, Dio Gracia Giménez...

Hay una sepultura que guarda los restos de León Jeoffroy, el padre del francés Aminthe Jeoffroy, primer fotógrafo y pintor de renombre en la región que dejó el pago en el 1900. Otros corazones revelan las consecuencias de las epidemias que asolaron el país, como la viruela, y que se cobraron la vida de muchos chicos, pero ninguna, absolutamente ninguna tumba, tiene una sola flor.
Fuente del Articulo: www.lanacion.com.ar

2 comentarios:

  1. Supe acercarme por allí, lo haría nuevamente,solo quisiera saber cómo saber dónde está sepultada alguna persona por favor ruego una respuesta, fliares,flores Portman,salva,Rivero, gracias

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  2. Encontré en los archivos a la bisabuela de mi marido,Lucia de Puntini,inmigrante italiana o austriaca, quisiera ir a ver si encuentro la tumba, el esposo descansa en Maria Grande.

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