Santa Fe Antiguo - Remembranzas del Ayer
Casa de los Gobernadores (Casa Leiva)
Santa Fe Antiguo
Fotografía: Fernando Rubén Marchi Schmidt.
El Tiempo, luna de curvas y cintas, ha enlazado en las viejas fotografías las palabras y las imágenes del Santa Fe de ayer.
Aromas antiguos se unen en una línea ininterrumpida de voces, pasos errantes, huellas que no naufragaron en la arena, historias no olvidadas, estrellas que brillaron en esta latitud azul de 31 grados.
Hay un letargo de barcos perdidos y lunas de ensueño que obstinadamente vagan por el río.
Están también las casas viejas, donde el viento sopla en el oído y en la boca, murmurando lo que es necesario recordar del ayer. Esas casas viejas que se erigieron en esta ciudad de arena y agua. Ciudad frágil en sostener su pasado, al que, pronto, en muchos casos, ha derrumbado como castillo en la playa. Pareciera una constante de fatalidad en este hombre de río, que ve irse lo construido en la arena dorada y lisa. Entonces cree que todo es
arena y lo deja caer sin una sola palabra para detenerlo.
Las casas viejas -muchas ya no están- son guardadoras de mensajes de Tiempo y Memoria, que cualquier hombre de cualquier tiempo puede leer y saborear a lo largo de los años.
Hemos recogido palabras que tocan el aire y lo extienden en un mar tibio y profundo donde se respira la memoria de los árboles.
En “Santa Fe Antiguo” hay testimonios de viajeros que pasaron, de hombres que vivieron y sufrieron bajo estas lunas amarillas que siempre se caen al río.
Hay historias que ignoramos y otras que guardamos como polvo de oro.
Hay aquí, otros años, capullos, crisálidas de otras épocas. Miles de pasados, sitios oscuros, lugares donde se apoyaron los ruidos y los resplandores.
Hay voces, ojos, manos, risas, sueños, sonidos, rostros, lágrimas, imágenes que sostienen la eternidad de la memoria.
Hay perfumes, vaivenes, suspiros que desentumecen los huesos y desprenden blandos movimientos de alegrías y ensueños.
Todo, para continuar la historia del hombre que es uno solo.
Con las palabras y las fotografías quisimos conjugar un tejido armonioso que respira el Tiempo: luces, entretonos, poesía, todos los sueños que hubo alguna vez, todos en el aire, a nuestro alrededor, rozándonos apenas las manos, volando, suspendidos, como vahos de sándalo y canela, entre nosotros.
Somos Santa Fe Antiguo.
María Guadalupe Allassia - Raquel Diez Rodríguez de Albornoz.
https://www.facebook.com/santafeantiguo
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